El combate cultural constituye la espina dorsal necesaria sobre la que articular la lucha política total por Europa. Sin un combate cultural efectivo, todo está perdido.
¿Qué es el COMBATE CULTURAL? Cuando se habla de “nuestra cultura”, se puede estar haciendo alusión de manera exclusiva a la producción cultural de nuestros pueblos (obras culturales y artísticas de cualquier disciplina), o bien a la idiosincrasia europea, un concepto mucho más amplio que englobaría la producción artístico-cultural como una consecuencia natural. Es a esta segunda acepción a la que va dirigido nuestro COMBATE CULTURAL, cuyo fin no es promover la conservación o la difusión del conjunto de bellas obras pasadas, sino garantizar la continuidad del sustrato anímico, volitivo, ético y espiritual del que éstas surgieron, es decir, el ethos y el volkstum que definen la esencia de nuestra civilización, y no su mera plasmación material en un momento histórico pasado ni, menos aún, el simple costumbrismo contemporáneo y superficial, ya degenerado casi sin excepción, y tan a menudo bandera “cultural” de la derecha, rancia o liberal, de toros y farándula, gastronomía y espectáculo. Cultura es el sistema de valores y creencias que genera una particular concepción del mundo, ordena la relación de los miembros de la comunidad entre sí y ofrece a los hombres un sentido existencial honorable que trasciende su individualidad, un sentido que guía su sentir, su pensar y su actuar. Es la sustancia de la identidad.
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Devenir Europeo 